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3591. Lunes, 30 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo nonagésimo primero: - ¿Y en tu colegio existe problema de drogas? – La verdad es que sí, no se encuentran fácilmente”.
Ya que uno no cree mucho en los poderes establecidos y tal (lo llamen repúblicas, monarquías, imperios o nosabenocontestan), será cuestión de, en vez de pedirle este año los regalos a los reyesmagos (que son reyes al fin y al cabo), pedírselos directamente a sus camellos, al fin y al cabo si vienen unos, vienen otros.
Así, con tiempo.
Que lo mires por donde lo mires, seguro que tienen mucha más variedad de lo que de verdad nos gustaría que nos trajeran que los otros tres monárquicos señores.
Y no es que estemos rebeldes, no, es que no tenemos edad de juguetes ya.
3590. Viernes, 27 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo nonagésimo: “No crezcas, es una trampa”
Dicen que madurar es aprender a reprimir el instinto asesino transformándolo en una sonrisa hipócrita, entender que las mejores cosas de la vida ya no son las que te despeinan, comprender el “ya te lo dije" de golpe, admitir las críticas vengan de donde vengan (porque sabes que rebotan, rebotan y en su culo explotan), aceptar que si buscas una mano que te ayude solo la encontrarás al final de tu brazo, notar que ya tienes más citas médicas que amorosas, saber que si plantas un árbol solo harás feliz a un perro, reconocer que lo malo no es vivir en las nubes sino bajar de ellas, o darte cuenta de que ya no te cabe el culo en los columpios.
Nos mienten.
Pero que no nos engañen, que no nos metan miedo (mucho cuidado con esos miedos, les encanta robar sueños), solo hay una cosa evidente: si uno madura, se pudre.
Por eso, todos los que somos personas jóvenes atrapadas en cuerpos viejos, y que sufrimos con angustia vital los síntomas de la incongruencia entre la edad mental y la edad gubernativa, reivindicamos la disforma de edad como enfermedad financiada. Con su correspondiente cambio de años en el deenei y sus subvenciones incluidas.
Mientras, y para “celebrar” lo de que cae uno oficial más, servidor invita a comer y beber lo mejor de lo mejor (con alternativa para los abstemios y todo), así, tirando la casa por la ventana como si no hubiera un mañana.
3589. Jueves, 26 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo octogésimo noveno: “Por la noche te despierta el calor. Te destapas, te entra frío. Vuelves a taparte y otra vez calor. Sacas una pierna por debajo de la sábana, le das la vuelta a la almohada, pones una mano en la cabeza, otra mano en la cintura, un movimiento sexy… así no hay quién coño duerma”.
Los que saben de estas historias (porque las usan) afirman que no hay peor cosa que acabar de pintarse las uñas y que te pique el culo... o que acabes de lavar el coche y que justo después llueva. Servidor ni se pinta las uñas ni sabe conducir, por lo que tampoco es cuestión de comparar, pero me da la sensación que acabar de ducharte y que te entren ganas de cagar… eso sí que es una putada. Y de las gordas.
Por cierto, como no tenía tijeras me he comprado unas tijeras, pues resulta que hacen falta unas tijeras para abrir las tijeras que me he comprado por no tener tijeras.
Vamos mal, muy mal. Y no nos damos ni cuenta.
3588. Miércoles, 25 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo octogésimo octavo: “Mi móvil pasa tanto tiempo cargando, que cada vez se parece más a un fijo”.
A estas alturas del año, no estaría de más darle un repaso a cómo va el cumplimiento de aquellos propósitos que uno se marcó hace unos meses y ver que he logrado:
Parece que me debería de apuntar al curso acelerado de coaching de toda la vida, también conocido como "¡espabila, coño!".
3587. Martes, 24 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo octogésimo séptimo: "!Me han follado tantas veces que dejé de creer en al amor! !Perrrrrrdón, fallado, quería decir fallado!".
Aprovechando que tenemos que elegir a los que nos van a mandar, digo que, si quieren ganar votos, este año en vez del famoso mensaje de siempre diciendo: la madrugada del próximo sábado 26 al domingo 27 de octubre habrá que retrasar los relojes una hora, de manera que a las 03:00 serán las 02:00, mientras que en las Islas Canarias a las 02:00 será la 01:00.
Iríamos en masa a votar a quien propusiera el mensaje:
La madrugada del próximo sábado 26 al domingo 27 de octubre habrá que retrasar las básculas 5 kilos (cuatro kilos en las Canarias, que se joroben por una vez, que para eso siempre son las islasafortunadas).
!Con lo fácil que tienen que los apoyemos y que no hay manera de que nos sean útiles de verdad! !Es que manda huevos"!
3586. Lunes, 23 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo octogésimo sexto: ” ¿De verdad era necesario aceptar una pareja de mosquitos en el arca?”.
En un arrebato te da por transgredir las normas establecidas y luchar contra los condicionamientos sociales. Y, cuando te quieres dar cuenta, resulta que hay gente que se para a tu lado y decide hacer lo mismo que tú. Y de golpe entiendes que puedes ser rebelde y estar integrado en un grupo, que puedes ser tú mismo y, a la vez, formar parte de un equipo... que eres un líder en potencia.
Y todo por pensar, delante del paso de cebra, que como no viene ningún coche sería un desperdicio empezar a cruzarlo sin hacer que nadie tenga que frenar.
Pensar no es bueno, ya lo sé, pero hay veces que hacerlo te sube la moral... y hasta te hace sentir poderoso, que de vez en cuando (solo de vez en cuando) no está mal.
3585. Viernes, 20 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo octogésimo quinto: ”Hoy quería ir a correr y al final he salido a comer. Está claro que lo mío no es vagancia sino dislexia”.
- Abogado defensor: ¿Cuál es su edad?
- Viejita indefensa: Tengo 84 años.
- Abogado defensor: podría decirnos, en sus propias palabras que fue lo que sucedió?
- Viejita Indefensa: Allí yo estaba, sentada en la mecedora en el porche de mi casa, en una agradable noche de primavera, cuando un joven se acercó y se sentó junto a mí.
- Abogado defensor: ¿Usted lo conocía?
- Viejita indefensa: No, pero él se mostró bastante amigable.
- Abogado defensor: ¿Que sucedió después de que él se sentó?
- Viejita indefensa: Él comenzó a acariciar mis piernas.
- Abogado defensor: ¿Usted lo detuvo?
- Viejita indefensa: No, yo no lo detuve.
- Abogado defensor: ¿Por qué?
- Viejita indefensa: Se sentía muy bien, nadie me había hecho eso desde que mi esposo murió hace 30 años.
- Abogado defensor: ¿Qué sucedió después?
- Viejita indefensa: El comenzó a acariciarme los senos.
- Abogado defensor: ¿Usted lo detuvo entonces?
- Viejita indefensa: No, yo no lo detuve
- Abogado defensor: ¿Por qué?
- Viejita indefensa: Bueno, señor juez sus caricias me hicieron sentir viva y excitada. No me había sentido así en muchos años
- Abogado defensor: ¿Qué sucedió después?
- Viejita indefensa: Bueno, yo me estaba sintiendo tan excitada que simplemente abrí mis piernas y le dije: Hazme tuya jovencito, tómame, hazme el amor.
- Abogado defensor: Entonces, ¿él la tomó, le hizo el amor?
- Viejita indefensa: ¡No! Solo gritó "Feliz día de los inocentes" y fue allí cuando le dispare y maté a ese hijo de puta...
Y es que hay cosas con las que no se debe de jugar. Nunca.
3584. Jueves, 19 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo octogésimo cuarto: “Si el camarero del bar de la facultad no se sabe tu nombre, no has aprovechado bien la carrera”.
¿Y quién no se ha despertado alguna vez sobresaltado pensando que llegaba tarde al trabajo y se ha tranquilizado al comprobar que ya estaba allí?
Al fin y al cabo ningún trabajo es malo, lo malo es tener que trabajar.
3583. Miércoles, 18 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo octogésimo tercero: “Estoy sentado al borde de la carretera, el conductor cambia la rueda. No me gusta el lugar de donde vengo. No me gusta el lugar adonde voy. ¿Por qué miro el cambio de rueda con impaciencia?”. (Berthold Brecht, 1898 - 1956 poeta alemán).
No hace falta fijarse mucho para saber que, cuando en un sitio con gente a alguien le llega un mensaje con sonidito al móvil, más del 70% de los allí presentes sacan sus teléfonos del bolsillo y los miran.
Y eso sabiendo perfectamente que los suyos tienen sonidos completamente distintos.
Pero lo más curioso es la ansiedad de aquellos que, al ir a mirar, se dan se dan cuenta de que no lo llevan y empiezan a toquetearse -primero los bolsillos y después todo el cuerpo- hasta que acaban en una total desesperación. No existe película de terror que supere la sensación de tocarse el bolsillo y no sentir el móvil
Científicos moldavos han ideado una aplicación que mediante un electrocardiograma realizado en tiempo real al susodicho, refleje el estado de angustia que se producen en estos casos.
La diferencia entre uno normal y otro en esta situación es evidente.
3582. Martes, 17 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo octogésimo segundo: “Yo quiero morir como mi abuelo, durmiendo tranquilo y no gritando desesperadamente como los cuarenta pasajeros del autobús que conducía”.
Hay un 5% de personashumanas que sufren paruresis o síndrome de vejiga tímida. Gente que es incapaz de mear si no es en su propio retrete.
Pero para el resto de los mortales, que con esto de la globalización y el lowcost viajamos todo lo que podemos, deberían de pensar seriamente en unificar los iconos que señalan donde hay que hacer aguas (menores o mayores). Evitarían algún desastre que otro, sobre todo teniendo en cuenta que la cosa suele ser urgente y que la mayoría de las veces no tienes tiempo de pensar dónde entrar.
Que se pongan de acuerdo ! coñoya!, que hay cada uno...
3581. Lunes, 16 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo octogésimo primero: “Que no nos engañen con sentimentalismos: las únicas personas que te marcan de por vida son los tatuadores”.
Las cosas hay que demostrarlas, no vale decir que algo es así porque lo digo yo por muy reputado (mira que suena extraña la palabra reputado oyes) o reputada (y sí, también suena mal) que sea quien emite el juicio.
Porque, a ver, podejemplo, por más que se empeñen en decir que beber leche da fuerza, la evidencia los deja en ídem ( osea-sé en evidencia).
Bebe 10 vasos e intenta mover una pared. No puedes.
Bebe 10 cervezas y verás como la pared se mueve sola.
Una reacción causa-efecto, evidente.
3580. Viernes, 13 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo octogésimo: “Vivimos en un mundo donde el funeral importa más que el muerto, la boda más que el amor y el físico más que el intelecto. Vivimos en la cultura del envase que desprecia el contenido”. (Eduardo Galeano, 1940 – 2015; periodista uruguayo).
!Divino clítoris! !Ese cacho de chichi más chachi del chocho!
Y es que a los que nos hemos criado, -!que digo criado! !vivido!- con la boooooomba, laramonaespechugona, el aserejé, la macarena, el tiburón, un tractor amarillo o el opáyoviacéuncorral (y no son las peores), somos de esa generación a la que nos corre por la poesía en vena.
Pura, profunda, suave, delicada y sobre todo, sobre todo, sensible poesía.
Pero de la (como debe ser) elegante, elegante, que para eso jaguaybombay son dos paraísos que a veces yo me monto en mi piso.
3579. Jueves, 12 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo septuagésimo noveno: “¡Ah, sí nos fuera dado el poder de vernos como nos ven los demás! De cuantos disparates y necedades nos veríamos libres”. (Robert Burns, 1759 – 1796; poeta británico).
Cuentan que en una pequeña ciudad de provincias, por ahí por la década de los años cincuenta del siglo pasado, había un baño público en el centro para aquellas ocasiones en que surgía la «necesidad». Era atendido por una señora a la entrada, ésta cobraba y repartía cuadritos de papel a cada uno de los usuarios para su higiene. Un negocio redondo, con poca inversión y mucha clientela, la mayoría cautiva, y al que no había que hacerle publicidad, para eso bastaba un simple letrero con dos letras: w.c. Un día, a un joven ocioso, pobre de cuna y desesperado por su mala suerte en la vida, se le ocurrió acercarse a la señora de la mesita y decirle: «las próximas dos meadas las invito yo», la única condición -especificó- fue que fueran clientas de la «alta sociedad». A la encargada le pareció extraño, pero aun así aceptó. El señor explicó que tenía que esperar a la salida para cobrarles, y justo cuando ellas sacaran sus monedas, les diría: «No es nada, ese señor que está allá enfrente las invitó», él haría un ademán con la mano y esperaría a ver la reacción. Primero llegó una señora de mediana edad, a quien le pareció extraño que la encargada le dijera que pagara a la salida, pero era tal su urgencia que no pidió más explicaciones. Al salir fue sorprendida con la inusual invitación. Los colores se le subieron hasta las orejas, no quiso ni ver quien le había convidado, así que disimuladamente hizo un pequeño movimiento con la cabeza y se fue, suplicándole a Dios que ningún conocido la hubiera visto. Después de un buen rato se acercó la señora Gutiérrez, una joven en edad casadera con padres de posibles, quien al salir fue sorprendida con la noticia: «no es nada, ya está pagado por el señor que está enfrente». La señorita Gutiérrez quedó desconcertada por el curioso detalle, así que se dio la vuelta, miró a su generoso bienhechor y con una leve sonrisa se acercó para agradecerle su invitación a la meada. El rumboso joven y la señorita Gutiérrez se casaron meses después (con la correspondiente redistribución de la riqueza), fueron felices y comieron perdices.
Fin.
Por eso, si uno tiene una hija es bueno ponerle Esperanza, será la última que se pierda.
3578. Miércoles, 11 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo septuagésimo octavo: “Todos seríamos más felices si trabajásemos de lo que nos gusta. En mi caso es muy difícil encontrar trabajo de croquetas de gambas”.
Que en las últimas revisiones los señores académicos (que fijan, limpian y den esplendor a la lengua) acepten vallenato como palabra legal, y encima lo definan como un tipo de música (¿musi...qué?), no deja de ser una tomadura de pelo. O que en esa misma revisión consideren al hummus un tipo de comida (¿comi...qué?) es, como poco, inquietante.
Y más teniendo en cuenta que !siguen sin aceptar cocreta!
En la RAE me los imagino sentados en sus sillones partiéndose el culo diciendo "!tío, tío, pon kosher, pon kosher, pero no pongas cocreta... que se jodan!". Pordiosbendito, pero si da igual que digas croqueta, cocreta, clocreta o cocleta, lo llames como lo llames algo así está bueno y punto.
Son ganas de tocar las narices.
3577. Martes, 10 septiembre, 2019
Capítulo Tres milésimo quingentésimo septuagésimo séptimo: “Hoy en relatos de terror: El conde Báscula”.
Ya que estamos en la era de la informática, de la inteligencia artificial y esas cosas, que digo yo que no estaría de más que esa gente tan lista como la que hay, se las ingeniaran para que en una próxima actualización el corazón tuviera un “eliminar contacto”, un “bloquear usuario” y un “borrar historial”.
Como poco.
Ayudaría bastante a mucha gente, que esto de las relaciones humanas es más complicado que conjugar el verbo abolir.
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