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2655. Miércoles, 13 mayo, 2015

 
Capítulo Dosmilésimo sexcentésimo quincuagésimo quinto: “La sagrada pasión de la amistad es tan dulce, firme y leal que durará a través de toda una vida. Siempre que no pidas prestado dinero a tu amigo" (Mark Twain, 1835 – 1910; escritor estadounidense).

Aunque ya están en decadencia, pocas cosas retratan la inmensidad intelectual de una personahumana como el tono que le pone a su teléfono.

Que vale, que si como decía el cocinero de ratatouille lo único previsible de la vida es su imprevisibilidad, puede que un día te levantes con alguna alteración mental transitoria y coloques la canción de davielgnomo, los teletubis o alguna de los payasosdelatele (y no hablo de los de sálvame sino del fofó, miliki y esos) pero es que hay algunos tarados (en el buen sentido de la palabra) que van y les dan por poner ruidos de pedos, eructos o gemidos de peliporno. Y encima cada vez que los llaman, ellos, todos orgullosos, los dejan sonar un buen rato mientras se descojonan de risa...

Igual que el resto se descojona de su gilipollez.