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251. Lunes, 12 enero 2004



Capítulo Ducentésimo quincuagésimo primero: ¿Por qué al increíble Hulk siempre se le rompe toda la ropa excepto, y precisamente, los pantalones?

Tenía yo una "seño" en mis años mozos, aquellos en que los "profesores" eran solo "maestros", que siempre nos insultaba de la misma forma cursi, muy a tono con su imagen de solterona de familia bien, educada en los mejores colegios de la provincia y "enseñante" por obligación al no encontrar a tiempo, marido que pudiera mantenerla como una señora bien de su casa.

Muy digna ella, miraba al techo, cogía aire y de carrerilla y sin creérselo mucho, invocaba al reino animal y nos llamaba "merluzos" y "percebes". Era a lo máximo que podía llegar con sus modales.

De todas formas no que creo yo que ninguno de nosotros, "atilas" de extrarradio y más bastos que un bocadillo de mortadela, quedara traumatizado por aquellas comparaciones.

Pero mira tú por dónde como cambian las cosas, resulta que de insultos nada de nada y, aunque estoy seguro de que ella no lo sabía, lo que estaba haciendo no era sino piropearnos... y piropearnos a lo grande.

Ahí dónde los veis los percebes son los primeros en la lista de seres vivos con el pene más grande y además a gran distancia del resto, les suele medir unos 23 cm. de longitud, lo que supera en más de 38 veces los más o menos 6 mm. que acostumbra a medir su cuerpo.

He echado cuentas solo para hacerme una idea, si yo mido 1,70 m. de altura y resultara o resultase que fuera o fuese un percebe, mi pene mediría casi 11 metros.

¡Y quien soy yo para contradecir a los "maestros"! ¿no?