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153. Martes, 22 Julio, 2003



Capítulo Centésimo quincuagésimo tercero: ¿Por qué la voz de un niño de cuatro años siempre tiene más volumen que la de doscientos adultos en un restaurante abarrotado?



Estoy buscando soluciones a mi "estres" laboral, a pesar de llevar a rajatabla la máxima de que "estar en el trabajo" y "trabajar" no tiene porqué coincidir en el 90% de los casos, tener cada día que venir, estar, y sobre todo, esperar obsesiva-compulsivamente la hora de salida, está minando mi salud a pasos agigantados.



Para compensar, había pensando en hacer más cosas cuando salgo de esta "prisión" diaria, algo que me hiciera olvidarme de mis siete horas malditas, no sé, cosas como organizar bautizos en un cementerio, ver videos de "madonna" en el "anal +, abobesé", o jugar a la piñata en una tienda de lámparas, pero he llegado a la conclusión de qué si el problema es durante el tiempo laboral, la solución también debe de ser dentro de ese horario y creo que he dado con ella: venir a trabajar desnudo.



Las ventajas serían evidentes, para empezar cada vez que te dijeran la frase esa de "date prisa, mueve el culo", podías demostrar de una manera clara y sin intermediarios, que lo estas moviendo, además de que iba a pasar muy desapercibido si uno llega tarde por aquello de desviar la atención a otros detalles, tipo ver si estas despeinado de más sitios que de la cabeza, por ejemplo.



Y que decir del ahorro de material, seguro que nadie iba a robarme los bolígrafos en cuanto viera donde los guardo, ni nadie iba a cambiar mi silla por esa otra llena de mocos pegados que va pasando de mesa en mesa, eso sin contar con la "pasta" que uno se iba a ahorrar con la excusa de que no llevas la cartera encima.



Además sería una forma de acabar con el acoso sexual laboral, no solo porqué la mayoría perdemos mucho desnudos, sino por la cantidad de mujeres que iban a librarse de que las estuvieran mirando continuamente al escote.



Para que engañarnos, ahora más que nunca necesitamos que se impongan nuevas tendencias si queremos que todo sea más eficiente, que uno esté en el trabajo más cómodo, que uno lo sobrelleve mejor, esta es la verdadera filosofía laboral que acabará recogiendo el "Estatuto de los trabajadores", tiempo al tiempo.)